Un lujito de Malbec. Muchas bondades para reconocerle a este vino. Como ya le cabe suponer es un vino que no le pasa desapercibido. Color intenso, casi negro, y una concentración en boca que al ratito pide algo para comer. Una complejidad justa entre los aromas frutales y los aromas que provienen del roble. El alcohol aporta un leve picor que le da más carácter al vino. Pulgares arriba! Eso sí no se olvide de preparar un picada y tenerla a mano.
Zona de origen: San Martín, Mendoza
Rango de precio: desconocido
Su momento: Un momento de lectura o una charlar interesante.
Con qué acompañarlo: Picadas de fiambres, quesos, pero sin mucho picante.
Lo mejor: la concentración
Lo que se puede mejorar: un leve toque de acidez más.