Si usted quiere conocer el potencial de una variedad, pruebe este vino, que es un representante puro de Malbec. Potente, concentrado y equilibrado. ¿Y todo eso que significa? Qué tiene los niveles de cuerpo, aromas y sensaciones bastante elevados, pero sin embargo son armónicos, bien conjugados.
Como es un vino sin paso por roble permite apreciar los aromas típicos del varietal. A mi me llevó directamente al veranos y la variedad de frutas de esa estación, en especial la ciruela, aunque también me trajo recuerdo a frutillas.
Otra sensación que me llamó la atención fue un toque de picor en la lengua, que obviamente se debe a su concentración de alcohol (14,5 %) y le da un carácter algo rebelde. Cuando lo tome le recomiendo que sea con un «pasito» rápido por heladera, especialmente si lo descorcha en verano.
Ojo es un vino que «da hambre». Después de dos tragos uno empieza a buscar algo para comer. Téngalo en cuenta.
Zona de origen: Gualtallary, Tupungato, Mendoza.
Rango de precio: $ 160-200
Su momento: una buena cena.
Con qué acompañarlo: cualquier comida intensa. Ojo con el picante que puede llegar a ser una mala combinación.
Lo mejor: la concentración